Contiene: Levantamiento social, indígena, aymara y popular de octubre se movió dentro de un amplio contexto sociogeoestratégico ya que en el altiplano-valle norte de LA Paz se mantuvo durante un mes los bloqueos carreteros. La movilización de la ciudad de El Alto fue parte y catalizador del levantamiento general que terminó teniendo un efecto territorializante del conflicto en otros departamientos del país. Asi las relaciones cotidianas, barriales y rurales, se convirtieron en centro del poder del levantamiento indígena urbano-rural, mediados por la capacidad de generación de micropoderes difusos o cuasi microbianas e intermitentes de movilización social. Muestra de ello son las marchas, los bloqueos, la toma pacífica de las avenidas y las plazas; y el posterior entrentamiento con las fuerzas el Estado-gobierno. El gobierno y el propio Estado desaparecieron de la ciudad de El Alto durante los días del levantamiento social. En respuesta se levantaron símbolos subalternos como la wiphala, el orgullo de saber hablar aymara, las prácticas de la religiosidad andina. Todo esto se ha dado desde la constitución de los poderosos microgobiernos barriales extendida en todo el territorio urbano de la ciudad de El Alto.

Español.