Un Cazador tenía muy mala puntería, cuando iba de cacería no lograba matar a los animales, solamente los hería. Esto se repetía constantemente cada vez que lo intentaba. Un día mientras se encontraba en el bosque intentando cazar, se le presentó el Toirsh, o "amo de animales", quien le regaña diciéndole que si quiere cazar debe tener buena puntería, porque él ya estaba cansado de curar a los animales que el mal cazador dejaba heridos. Dicho aquello, el Toirsh reta al cazador a una pelea. Durante el enfrentamiento el cazador esta a punto de perder y ser devorado por Toirsh, pero su suerte cambia cuando se presenta un ángel del cielo.

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